jueves, octubre 30, 2008

De chirigota

Los géneros literarios responden a las necesidades artísticas del escritor. Una batalla se cuenta con las herramientas de la épica. ¿El amor a primera vista? Echemos mano de la lírica. Si el enamoramiento fuese a primera VISA entonces echaríamos mano de la sátira y de la cartera. Para contar la gesta de una nación no hay nada mejor que la epopeya, para la muerte siempre hay un soneto fúnebre a mano o una copla manriqueña, el gozo se canta por décimas o seguidillas, la reflexión profunda cabe en una soleá… Y todo en este plan.

En la Diputación de Cádiz se han puesto manos a la obra y las chicas del partido -¿de qué partido va a ser, hombre?- han formado una agrupación literaria y musical que encaja perfectamente con los tiempos que corren y que vuelan. ¿Un coro? Lagarta, lagarta. ¿Una rondalla a la vieja usanza? Lejos de nosotros y de nosotras la funesta manía de la bandurria y el laúd. ¿Un grupo de sevillanas? Eso ya no está de moda. Estas servidoras de lo público, estas abanderadas de la vanguardia de género se han reunido alrededor del grupo que mejor define lo que está pasando en la política andaluza: la chirigota.

¡Ole, ole y ole! Y al que no diga ole, que se le seque la yerbabuena del PER. Las sociatas de carné que han formado la chirigota ‘Las majorettes’ –ojo al feminismo que desprende el nombre- no lo han hecho por al amor al arte. Lo de ‘gratis et amore’ suena a carca porque está en latín, una lengua prelogsiana. Por eso han trincado unos cuantos miles de euros de la Diputación que rige con mano firme y firma blanda –sobre todo a la hora de rubricar contrataciones de afiliados al parido- el ilustre González Cabaña, ese descendiente político de don Emilio Castelar por vía intragaditana.

El dinero público se gasta en una chirigota que han montado unas cuantas dirigentes del PSOE en la muy desarrollada provincia de Cádiz. A los parados de Delphi se los llevan al zoo y las listillas que salen en las listas electorales usan ese mismo verbo según la doctrina que establecieron el Masa, el Peña y los hermanos Scapachini en el cuarteto “Tres notas musicales” del año 1991: “Señores, vamos a llevarnos bien… lo que haya que llevarse”. Ahora que se llevan los reportajes que muestran la faceta humana de los consejeros y consejeras de la Junta –la faceta divina se mostrará más adelante- no estaría mal un programita de Canal Sur que nos permitiera asistir a los ensayos de estas majorettes con sueldo público que no tienen el menor pudor a la hora de cobrar fuera aparte, que diría un castizo, de la Diputación de Cádiz por sus habilidades chirigoteras.

Cuando un gadita quiere alabar el tipo, la gracia, el arte y los ripios a medida de una chirigota emplea una expresión que viene como anillo al dedo –o como dedillo al ano, con perdón- para definir lo que pasa en la política andaluza. “¡Aquí lo que hay es ‘mu’ poca vergüenza!” Las majorettes que trincan su sobresueldo de la Diputación gaditana no deberían molestarse por esta expresión: no hay mayor elogio carnavalero. El presidente González Cabaña debería estar orgulloso del empleo que se le da al dinero público. A ver si convence a su asesor Aído para que monte un cuarteto con su niña y con el intelectual Luis Pizarro, el Arias Montano de Alcalá de los Gazules. ¿O metemos directamente a la ministra Bibiana en ‘Las majorettes’ con su faldita corta y sus botas blancas? De las progres de antaño a las majorettes de hogaño. Eso es un cambio y lo demás es tontería.

Con las bombas que tiraban los fanfarrones –el espíritu belicista siempre ha estado ligado al machismo- se hacían las gaditanas los tirabuzones de la copla. Con la pasta que tiran las Diputaciones, se hacen las socialistas sus subvenciones… Ya lo dijeron el Peñita y el Masa en el Falla antes de que se adaptara la frase a la transversalidad de género: Señoras, vamos a llevarnos bien… lo que haya que llevarse.

miércoles, octubre 22, 2008

El Ayuntamiento de Ketama

“No estamos locos, sabemos lo que queremos”. El alcalde rompió en Ketama durante la inauguración del Centro de Investigación Teatral TNT. Allí se presentó don Alfredo, que por algo es el director del Centro de Investigación del Distrito Macarena, lugar escogido para la representación de la obra “Factura2”, todo junto y con número, que queda más ‘modelno’. Está visto y comprobado que la poética de Antonio Machado se ha desvanecido para dejar paso a las tres fuentes de inspiración de la retórica alfrediana: Alejandro Sanz, Chambao y Ketama.

El grupo Ketama del Ayuntamiento de Sevilla está compuesto por Alfredito Buena Gente, Antonio Rodrigo Torrijos, alias el Pipa, y el corista Manuel Marchena, más conocido como Pincelada. Los tres se encajaron en el teatro para inaugurarlo. Una vez cumplido el protocolo y hechas las fotos de rigor, el trío Ketama se largó para buscar un lugar más acorde con sus intereses. “Alfredo, me han dicho que han abierto un sitio nuevo cerca de mi casa donde ponen unas pinceladas...” Ninguno se quedó a la obra de teatro. La razón es obvia: están hartos de representar un papel en el corral de comedias de la Granja de San Francisco. Torrijos, que es más ideológico, se iría en busca de las escrituras de ese garaje que no incluyó en su declaración de bienes. El perifrástico portavoz del comunismo -¡qué antigualla!- hispalense nos ha recordado el anuncio aquel de los dulces circulares que exhibían un espacio vacío en su interior: ¡Andá, los donuts! ¡Andá, el garaje!

La canción de Ketama que escogió el alcalde para inaugurar un teatro puede servir para recorrer la ciudad a través del ‘Atlas Maior 1665’ que estos descendientes de Rinconete y Cortadillo se han regalado a sí mismos con el dinero de todos. “No estamos locos, sabemos lo que leemos, nunca gastamos, en libros nuestro dinero...” Si esto no es corrupción con todas las letras, que venga Cervantes y lo vea. Se han ‘autorregalado’ –ojo al nuevo vocablo- sendos ejemplares de un Atlas de lujo cuyo precio es de 150 euros. Esta izquierda de mentira no dedica el dinero público para surtir de libros las bibliotecas municipales, sino para comprar libros de lujo que se los llevan directamente a sus respectivas casas. Si no devuelven ‘ipso facto’ esos lujosos volúmenes tendrán que llevar sobre sus espaldas los mismos calificativos que adornaban a los pícaros cervantinos que poblaban las gradas catedralicias. Y en caso de tribulación deberían encomendarse directamente a san Dimas, que por algo era el buen ladrón.

El nivel de desvergüenza y desahogo no tiene límites. Saben que la ciudad está envuelta en ese humo de Ketama que deja a sus habitantes con una sonrisa bobalicona en los labios y con una nube en el cerebro. “No estamos locos, sabemos lo que firmamos, dobles facturas, ‘pa’ mi primo y ‘pa’ mi hermano...” Los azulejos que marcaban el punto al que llegaba el agua en las riadas de antaño se quedan en pañales si los comparamos con los indicadores que reflejan, casi a diario, una nueva crecida de las aguas turbias que corrompen la política sevillana. Por mucho que Torrijos se saque la palabra ‘menúa’ que siempre tiene a mano, aquí no puede derivarse la culpa hacia el que denuncia. Los culpables de las corruptelas marineras y ketameras que infectan la ciudad no son los que denuncian tales prácticas, sino los que las promueven y los que las consienten.

“No estamos locos, sabemos lo que trincamos, monta una empresa y luego te contratamos...” Sevilla se ha entregado a una cuadrilla de pícaros sin escrúpulos que son capaces de poner su honor en almoneda por cinco mil duros. Ese es el precio que hay que pagar para corromper a un alto cargo municipal que coge el libro de lujo y se lo lleva a su casa sin pasar previamente por caja. O que le paga una web a su primo hermano sin que haya aparecido todavía en Internet. O que contrata con empresas creadas para tal fin. O que se olvida del garaje que no cuadra con su discurso sobre la sostenibilidad y que lo encuadra en la categoría de especulador del urbanismo capitalista.

Estos libros de lujo se repartieron cuando Carrillo todavía era delegado de Urbanismo bajo sospecha. Ahora se dedica a dar cursos en el Círculo Mercantil bajo un título salido de una sesión de Ketama: “Taller de espiritualidad para buscadores”. La sesión de ayer no dejaba lugar a dudas: “The matrix: la mente del todo”. No comment. El que sí ‘comment’ es Marchena, alias Pincelada, que canta por Ketama: “No estamos locos, sabemos lo que comemos, pon más cigalas, que paga el Ayuntamiento...”

lunes, octubre 20, 2008

Facturas de Embustesa, Empresa Municipal de Facturas Falsas

EMBUSTESA

SIF: W-000100
Domicilio fiscal: Avenida de la Liebre s/p
Domicilio penal: Rotonda del Tempranillo, 5
Factura número: 35-A / 36-B // 2008
Fecha: 15 de otubre de 2008.


CONCEPTO A: Arreglo y reposición de los azulejos de la Torre del Oro

CONCEPTO B: Subvención de la Asociación Por Aquí te Quiero Ver


TOTAL LEUROS: 2.399,99



En Sevilla, a 15 de otubre de 2008



Para cobrar por la CARA (Caja de Ahorros Ranilla) en ventanilla.

miércoles, octubre 15, 2008

Régimen sin fronteras

Hay un verso del tango de Gardel que identifica al personaje con seis palabras: que veinte años no es nada. Cuando está a punto de cumplir dos décadas al frente del virreinato que despreció en su día, Chaves se ha lanzado a la propagación del régimen más allá de las fronteras andaluzas. Ha sido en Argentina. Foto con las reinas de otras tantas asociaciones andaluzas ataviadas a la antigua y rancia usanza que debería poner de los nervios a Bibiana Aído, pero ya se sabe que la hija de un asesor de la Diputación de Cádiz no se mete en estas cosas cuando el bueno de Manolo está presente. ¡Ay, el feminismo de conveniencia!

Chaves ha anunciado una reforma de la Ley Electoral para que los emigrantes cuenten con escaños propios en el Parlamento de Andalucía. Está visto y comprobado que el padrecito del régimen está dispuesto a hacer lo que sea con tal de no perder lo único que tiene: el poder. Hay ricos que son pobres con dinero y hay intelectuales que son imbéciles con carrera. Pues eso. Hay políticos que son mediocres con poder. Si se les quita la poltrona se caen al suelo y pasan inadvertidos para el resto de los mortales. ¿Hace falta decir de quién estamos hablando?

El pasado jueves ya se comprobó en el mismo Parlamento de Andalucía que el régimen no está dispuesto a perder ni una sola votación. La ausencia de Chaves, que pospone su deber sagrado de depositario de la soberanía popular a la foto con la Ejecutiva de su partido, provocó una sonora derrota del PSOE andaluz en su propio cortijo. Entonces salió el altavoz Pizarro para darnos una de sus lecciones de democracia orgánica. ¡Qué magnífico jefe provincial del Movimiento se perdió el franquismo! Sostiene Pizarro que los diputados no deben votar según les dicte la conciencia ni el programa con el que se presentaron a las elecciones, sino que deben atender a la aritmética electoral para que el partido del régimen no pierda nunca. Un ‘poné’: si Valderas o Arenas prevén que el PSOE puede perder una votación por la ausencia del bueno de Manolo, entonces deben ordenar a sus disciplinadas huestes que voten en contra de las ideas de su propio partido para no incomodar al jefe de la tribu. ¡Arriba Andalucía! ¡Camarada Manuel Chaves! ¡Ausente y presente! Pónganle la guinda de Zinedine Zarrías bordeando a la presidenta Fuensanta, agua mineral sin gas, diciendo que le ha fallado el miembro y ya tienen sobre la mesa el último esperpento de Valle-Inclán.

Para no perder nunca, que es de lo que se trata en este régimen donde el ‘resultadismo’ deja en dodotis la filosofía futbolera de Bilardo, el mago Manolo pretende engañarnos con un truco tan burdo como eficaz. Si los emigrantes contaran con varios escaños propios, entonces daría igual el nivel de abstención: se adjudicarían esos sillones aunque la participación fuera menor que la del referéndum del nuevo Estatuto. Y como el PSOE se lleva de calle esos votos gracias a la derrama de subvenciones que el régimen va depositando para extender la red clientelar allende nuestras fronteras, pues miel sobre hojuelas. Inciso en forma de pregunta de Pizarro a Chaves tras proponerle este plan que ha salido del miembro de Zarrías: “Eso está muy bien, Manolo, pero no entiendo por qué hay que repartir tarros de miel entre los ‘migrantes’ pa que nos voten”.

Con nuestros impuestos se subvencionan romerías de pega, cursos de sevillanas al otro lado del charco, ferias y cruces de mayo que allí caen en otoño, procesiones que vienen a reforzar el carácter laico del régimen chavesiano… Pero hay algo que pagamos a escote para que Chaves haga su propaganda gratis y que refleja perfectamente lo que ocurre aquí: fiestas de disfraces. El mismo Chaves se ha disfrazado de Gardel para cantar en Buenos Aires el tango que define su carrera: veinte años no es nada. Por eso su vida política consiste en volver.

viernes, octubre 10, 2008

Gabinete de crisis

Serie “El ala oeste de la Casa Rosa”. Capítulo 936. Interior día. Un reloj de pared marca las once de la mañana, hora en que el presidente convoca a su gabinete tras haber pasado por el gimnasio, la ducha y el desayuno. Por los pasillos de la Casa Rosa caminan Gaspar Zarrías, Luis Pizarro y Rafael Camacho, director de CNN Sur.
Zarrías: Señores y señoras…
Chaves: ¿Señoras?
Pizarro: Eso digo yo, si sólo ‘habemos’ hombres aquí.
Zarrías: Pero esto queda grabado y me pueden llamar la atención en el Observatorio Institucional para la Equivalencia Sintáctica de Género . Y ya saben ustedes que aquí lo importante es la sintaxis…
Pizarro: ¿Otra vez hay ‘juerga’ y nos ‘vemos’ quedado sin taxis?
Camacho: ¡Ay, Luis, que hablas igual que los invitados de mi CNN Sur!
Chaves: Dejemos estas cuestiones que sólo pueden provocar que nos salga el tiro por la cuneta y vayamos a lo importante. Gaspar, saca el informe sobre la crisis ‘ecuménica’.
Zarrías: Has dicho bien, presidente, porque la crisis es ecuménica, esto es, afecta a todos los países del mundo.
Pizarro: A unos más que a otros. Las comunidades del PP y los Estados de los republicanos están peor que nosotros. Sin embargo, donde gobierna Obama y el PSOE no pasa eso.
Zarrías: Obama no gobierna de momento en ningún estado, y de esto ya hablo yo en el punto tercero del informe. Ahora vayamos al apartado principal. ¿Quién tiene la culpa de la crisis?
Todos a una: ¡La derecha!
La cámara inicia un travelling que recoge los rostros satisfechos de los asistentes a la reunión. Hay un silencio de júbilo que se ve interrumpido por una llamada interna a través del interfono.
Voz de la secretaria: Presidente, es una llamada urgente, código rojo. Le paso.
Chaves (con cara de ofuscación): Aquí el presidente de la Junta de Andalucía.
Voz de Zapatero: ¡Hombre, Manolo, qué alegría! Estamos en Moncloa diseñando el Plan Especial contra le Crisis y hemos llegado a una conclusión que deberíais manejar ahí abajo. La culpa de todo esto la tiene la derecha. ¿Entendido?
Chaves: Aquí habíamos llegado a la misma conclusión, José María…
Zapatero: José Luis si no te importa. José María es el otro, o sea, el malo de esta película. Te dejo, que Pepiño está razonando algo y hay que aprovechar el momento, no vaya a ser que se le olvide. Saludos a Antoñita.
Chaves: Lo mismo digo, dale un beso a Carla. Adiós. (Se corta la comunicación. Chaves de dirige a los reunidos, que apenas pueden aguantar la risa). Bien, ¿por dónde veníamos?
Zarrías: Íbamos y veníamos precisamente por ahí, por el culpable de la crisis. Y habíamos llegado a la misma conclusión que el gabinete de Moncloa. La culpa de todo la tiene la derecha. A partir de ahora pongamos nombres y apellidos.
Camacho: Puedo hacer un reportaje sobre la mala gestión de Bush en CNN Sur. Una voz en off le echará la culpa a los neocon.
Zarrías: Perfecto. Veo que has recibido el mensaje.
Pizarro: Eso está bien, pero nuestra gente no lo entiende y creerá que neocon es lo contrario de la cerveza sin o algo ‘asín’. Propongo echarle la culpa a Aznar, que sale más barato.
Chaves: Has dado en el martillo, Luis. La culpa es de Aznar por su participación en la Guerra de Irak. Gaspar, pon a calentar la maquinaria. Y yo diré la frase que me han preparado los asesores del departamento de Consignas Presidenciales. “Ni Zapatero ni Chaves tienen la culpa de la crisis”. Porque si lo digo en primera persona puede haber un alcalde que la repita tal cual y diga esto: “Ni Zapatero ni yo tenemos la culpa de la crisis”. Entonces la gente puede pensar que he sido Chaves, o que ha sido yo, o lo que sea. Mejor así de clarito. ¿Entendido?
Zarrías: Asunto resuelto. Camacho, ya estás llamando al Canalillo.
Chaves: Se levanta la sesión. (Pulsando el interfono). Ponme con Antoñita, a ver si ya están las ‘cocletas’ hechas. Esto de resolver los problemas el pueblo andaluz abre el apetito de una manera…

martes, octubre 07, 2008

El tesoro de la carambola

Se han cumplido cincuenta años del descubrimiento del tesoro del Carambolo. Fiel a sí misma, la ciudad se ha volcado en la celebración. El lugar donde se encontraron las joyas de oro que acariciaron Argantonio y Argalfredo, sucesor del mítico rey tartesio, está de dulce. Un Parque Arqueológico con mayúsculas nos ha situado, una vez más, en la punta de lanza de la cultura europea. El turismo de alta calidad no se pierde una visita al Carambolo’s Center, actividad que continúa en Itálica y que se remata con un recorrido por el Museo Arqueológico felizmente remozado gracias a las aportaciones del Gobierno amigo de Zapatero.

Todo lo dicho anteriormente es tan falso, tan falso que parece propaganda institucional. Sólo le falta a ese párrafo una ilustración con la catedral de Palma del Río asomándose al Guadalquivir a su paso por Mallorca. ¿Para qué vamos a pedir un Museo de las Atarazanas si las agujas góticas de la catedral de Palma de Mallorca ya forman parte del paisaje trianero? Teníamos dos catedrales, dos, y no nos habíamos dado cuenta. A ver qué ciudad del mundo puede presumir de esto.

La ironía es necesaria para que no se atragante lo que ha vivido el patrimonio de la ciudad durante estos siete días. El gobierno ignora la ampliación del Mueso de Bellas Artes y el fiel Viera, maestro mayor del socialismo sevillano, dice que Zapatero ha cumplido con Sevilla con creces (sic). Ni un euro para Fibes, pero eso ya es lo de menos. Nadie le pide al PSOE sevillano que le reclame al marido de Sonsoles la promesa que le hizo a la ciudad en el Turruñuelo. Nadie. Ni siquiera esa portavoz Montaño que le mandaba recados a Tita Cervera para que se trajera su colección de pintura costumbrista. Está visto y comprobado que aquí preferimos a los primos del alcalde o de Lolo que a la Tita que se ha ido a Málaga con los lienzos mientras nosotros nos quedábamos en cuadro.

Añádanle a la lista el sangrante caso de la colección Carranza. El alcaide Galindo desprecia a este mecenas que le ofrece la mejor colección de cerámica que imaginarse pueda. En el Alcázar no hay sitio, dice el mismo Galindo que encontró allí un lugar para él, para su sueldo cuando esa función nunca estuvo remunerada, y para su forma de hacer política desde la demagogia guerracivilista y desde un autoritarismo que define a la perfección su mediocridad. Si luego nos enteramos de que se dedica a censurar libros porque no responden a su versión de la media memoria histórica, entonces comprenderemos que este prócer es el sucesor nato de Pedro I el Cruel.

Pero el personaje que marcará la historia de Sevilla en estos albores del siglo XXI es el sucesor del mítico rey de la Tartéside al que ahora quieren convertir en un vulgar comerciante fenicio. He aquí la figura colosal de Argantonio Rodrigo Torrijos, que ha cambiado el antiguo emplazamiento del tiro de pichón por el paredón donde la extrema derecha sevillana fusilará a los palomos del comunismo. Argantonio Rodrigo Torrijos se encontró, hace cinco años, con el tesoro de la carambola cuando se abrieron las urnas electorales. Por allí no andaba el profesor Carriazo en busca de esas muñecas en cueros que encontraban los albañiles y que eran diosas romanas de un mármol tan duro como el rostro de algunos gobernantes actuales.

Gracias el tesoro de la carambola, Argantonio Rodrigo Torrijos pudo disfrutar del poder por medio de un pacto de gobierno tan legal como legítimo. A partir de entonces se erigió en el mítico defensor de la clase obrera, en el principal agente de las transferencias de renta del capital hacia los más desfavorecidos, en el látigo de la derechona política, económica y mediática. Un héroe con todos los avíos y con un discurso lleno de giros sintácticos, de comparaciones historicistas, de dialéctica y de pedagogía ideológica.

Así es normal que la antigua Plaza de España, hoy Plaza del Estado Español, luzca en todo su esplendor gracias a la labor de Argantonio y de Argalfredo. O que el monte del Carambolo sea la envidia de los arqueólogos de medio mundo y parte del otro. Las bolsas de basura, los desperdicios y los escombros, el abandono de un lugar que podría convertirse en uno de los yacimientos arqueológicos más interesantes del mundo así lo atestiguan. La misma basura que se acumula en el cerro del Carambolo es la que cubre de gloria a Argalfedo y a Argantonio, esos dos fenicios de vocación que se llegaron al poder gracias al tesoro de la carambola.

lunes, octubre 06, 2008

Ciudadano García

¿Le compraría usted un coche usado a ese candidato que acaba de prometerle el oro y el moro en un mitin o en un folleto que no tiene validez alguna si no se cumplen sus cláusulas? Esta pregunta sirve para medir el grado de confianza en los políticos. El coche usado como metáfora no está mal. Pero en esta Andalucía donde nada es lo que parece hay que echar mano de otras comparaciones que permitan explicar lo que sucede. Pongamos un ejemplo, vulgo un ‘poné’.

El ciudadano García firmó el día 10 de enero de 2004 un contrato con una inmobiliaria. En ese momento soltó la entrada y se comprometió a pagar una serie de plazos para adquirir una vivienda cuya fecha de entrega aparecía en el pliego de condiciones: 24 de junio de 2006. El ciudadano García, que se llama Juan como su hijo y como su padre, se puso la mar de contento. Al cabo de dos años y medio celebraría su onomástica, o sea su santo, en compañía de la familia y con las llaves de la nueva vivienda en su bolsillo.

Pasaron los años y las obras empezaron a ralentizarse. Hubo un accidente en una promoción similar que otra empresa levantaba en Cataluña, lo cual le sirvió a la inmobiliaria que contrató con el señor García para convencerlo de que los retrasos que se producirían a partir de ese momento eran por su seguridad. “No queremos que a un hijo suyo se le caiga el techo mientras duerme, o que alguien de su familia se electrocute en el cuarto de baño”. El ciudadano García se preguntó en voz baja si eso no estaba contemplado en el proyecto inicial, pero se encogió de hombros y siguió pagando los plazos.

Pasaron los meses y todo seguía igual… o peor. La máquina que se encargaba de los cimientos perdía aceite y se averiaba cada dos por tres, que son seis. La financiación del proyecto estaba en el aire. El arquitecto se puso a diseñar el tejado cuando ya estaba levantado el primer piso. No se sabía por dónde irían los viales de la urbanización. Un día se les cayó una enorme viga que cruzaba una calle muy transitada: no pasó nada porque Dios o Alguien –así lo llamaba el uruguayo Juan Carlos Onetti- no quiso. Los obreros soltaron los bocadillos y alertaron a los vecinos que en ese momento podrían haber muerto aplastados. La empresa dijo que había sido una caída controlada y todo el mundo se quedó tan pancho.
Después de varios anuncios incumplidos, la empresa le anuncia al ciudadano García que el 20 de diciembre tendrá su casa, aunque no podrá usar uno de los dormitorios ni el cuarto de baño de la planta baja hasta dentro de unos meses. Cinco años para una obra que debería haber durado exactamente la mitad. Y con una entrega incompleta. Para colmo de parabienes, la empresa le dice al ciudadano García que esta casa que él ha pagado es el regalo de Reyes anticipado que la inmobiliaria le hará este año.

Todo lo anterior –los incrédulos pueden repasar los párrafos y verán que no hay ni una sola mentira- es una alegoría sobre la gestión de la única línea de metro que el régimen de Chaves habrá construido de forma incompleta al cabo de veinte años: cuando se inaugure la segunda se habrá rebasado con creces ese tiempo. ¿El ciudadano García le agradecerá a la inmobiliaria sus desvelos para construirle su casa? Pues claro que sí. Y volverá a confiar en esa empresa comprándole un apartamento en la playa o una casita en la sierra. Que los niños duerman todos juntos en un mismo dormitorio hasta que terminen lo que falta es normal: en los hospitales pasa lo mismo y nadie protesta.

El ciudadano García le compraría al político de turno, vulgo Erchave, un coche averiado y le daría las gracias por ese motivo: como no puede cogerlo para ir a trabajar, se ahorra un dinerito en gasolina, que la cosa está muy mala. El ciudadano García tiene lo que se merece. Ni más ni menos.

jueves, octubre 02, 2008

Esto es lo que hay

“¿A qué se debe que los productos para televisión nos parezcan, en el mejor de los casos, un arte de usar y tirar, que pueden sorprender e incluso emocionar una semana, pero que son rápidamente olvidados a los pocos meses?” El incisivo José Javier Esparza, estudioso del arte y crítico de televisión, se hace esta pregunta en su recomendable libro Los ocho pecados capitales del arte contemporáneo. Esa pregunta persiste en el aire y en la memoria que apenas puede retener algún pasaje efímero de aquellos programas de televisión que nos resultaban tan modernos y que ahora, al cabo de unos cuantos años, nos parecen unas antiguallas cuando los vemos en alguna recopilación. ¿O no son antiguos el ballet Zoom, la estética de Aplauso o los diálogos de Farmacia de guardia?

En Canal Sur han cumplido la máxima de aquel poeta menor al que tan certeramente retrató Borges en dos trazos: “La meta es el olvido. / Yo he llegado antes”. Sólo hay que ver programas como “La tarde con María” o “Menuda noche” para comprender que hay productos que ya nacen con el olor a rancio impreso en su formato. Por eso el prócer de la Andalucía de la Enésima Modernización ha elegido a uno de los cerebritos que diseñó tales engendros para que dirija la nave de la RTVA. ¿No queríamos un director independiente y alejado de la política? Pues toma del frasco: Carrasco se llama el elegido por el dedo que se asemeja cada vez más al que pintó Miguel Ángel en la Capilla Sixtina.

En esta elección no hay que seguir el señuelo que nos ha puesto la omnipotente maquinaria del régimen. Aquí lo de menos es que el elegido no lleve el carné en la boca, o que su curriculum televisivo esté jalonado de programas donde se le rinde culto a lo chabacano, se utiliza a los niños como carne de pantalla o se inyecta dinero público a espuertas para que Pepe Navarro pueda reciclar la basura sacándola por la noche en la tele. Eso es lo de menos. Donde hay que poner el bisturí del análisis es en el método elegido una vez más. Un método que podría definirse con el nombre de aquel programa de televisión que envejeció tanto que se perdió en los meandros del olvido, aunque nos haya dejado, como recuerdo fugaz, la cantinela de su sintonía: “¡Ay, ay, ay, ay, ay... esto es lo que hay!”

Luis Pizarro, alias LP por su facultad a la hora de reproducir el discurso chavesiano como un disco rayado, ha echado mano una vez más de la consigna que se maneja diariamente en el ala oeste de la Casa Rosa: eso sí que tendría una serie de televisión... El nombramiento del nuevo jefe de Canal Sur lo ha decidido Chaves personalmente. Y esto es lo que hay. El PP debe tragar y decir que sí. El PSOE ha cumplido su parte del contrato, como ayer señaló este LP que va camino de convertirse en el sucesor de Groucho Marx. El PSOE ha cumplido... porque ha nombrado directamente al sucesor del Doctor Mabuse Camacho al frente del Canalillo. Y si alguien no está conforme, ya sabe: esto es lo que hay.

Este latiguillo con el que nos flagelan a diario les sirve para todo. ¿Expediente de regulación del desempleo que terminará por cargarse la plantilla de Santana? Esto es lo que hay. ¿Dónde están las empresas que iban a recolocar a los parados de Delphi que asisten a la guardería donde los entretienen con cursillos que convierten al difunto PPO en una ingeniería superior? Esto es lo que hay. ¿Cómo es posible que se les nieguen las cacareadas ayudas a personas que han cumplido más de un siglo de vida mientras la Junta se salta la Ley de Dependencia? Esto es lo que hay. Y en Canal Sur, como ya hemos comprobado una vez más, colocan a uno de los suyos. Al pueblo le dan chopped mientras las productoras se quedan con el pata negra. Ya lo ha dicho el disco rayado, el LP de Luis Pizarro. Esto es lo que hay. Y si no quieres caldo, toma del frasco: Carrasco.